Hace ya 10 días que me quitaron el molesto yeso. Sin embargo los primeros días poco he podido hacer debido a la debilidad muscular y a la nula movilidad que tenia en la pierna después de las más de 8 semanas que he llevado la pierna totalmente inmóvil.
Pero la cosa empieza a cambiar. Junto con los ejercicios que hago en casa y la rehabilitación, ya puedo moverme algo mejor. Y ayer ya fui a la piscina, en principio solo a hacer ejercicios en la piscina pequeña, pero no pude evitarlo...y me puse finalmente en la de 25 metros a hacer algún que otro largo. Salieron 500m. Pero lo mejor de todo, la sensación que obtuve, no solo mientras nadaba sino al largo de todo el día. Por un lado me sentía torpe, pesada, sin fondo y técnicamente horrible, pero ....ni siquiera era perceptible en comparación con la sensación de poder volver a nadar, de disfrutar en el agua, de ser yo misma, de sentirme libre, de sentir la felicidad con todo su potencial recorriendo cada milímetro de mi cuerpo. Seguramente no daba la impresión de ser un pez en el agua, pero yo si que me sentía así. Quien me iba a decir que hasta iba a disfrutar de notar la olor del cloro en mi piel.
Hoy, vuelta a la piscina! Sin duda la mejor parte del día. Ya han caído 1000m aunque muuuuuy muuuuy suaves, combinando trabajo de piernas y de brazos, las dos cosas a la vez aun no soy capaz de controlarlas. Y mañana, ...repetimos! como las natillas! ( que por cierto me han entrado ganas de comerme unas!)
Como veis en breve estaré ahí, entrenando para lo que haga falta. Nada puede detenerme ya!
Pero la cosa empieza a cambiar. Junto con los ejercicios que hago en casa y la rehabilitación, ya puedo moverme algo mejor. Y ayer ya fui a la piscina, en principio solo a hacer ejercicios en la piscina pequeña, pero no pude evitarlo...y me puse finalmente en la de 25 metros a hacer algún que otro largo. Salieron 500m. Pero lo mejor de todo, la sensación que obtuve, no solo mientras nadaba sino al largo de todo el día. Por un lado me sentía torpe, pesada, sin fondo y técnicamente horrible, pero ....ni siquiera era perceptible en comparación con la sensación de poder volver a nadar, de disfrutar en el agua, de ser yo misma, de sentirme libre, de sentir la felicidad con todo su potencial recorriendo cada milímetro de mi cuerpo. Seguramente no daba la impresión de ser un pez en el agua, pero yo si que me sentía así. Quien me iba a decir que hasta iba a disfrutar de notar la olor del cloro en mi piel.
Hoy, vuelta a la piscina! Sin duda la mejor parte del día. Ya han caído 1000m aunque muuuuuy muuuuy suaves, combinando trabajo de piernas y de brazos, las dos cosas a la vez aun no soy capaz de controlarlas. Y mañana, ...repetimos! como las natillas! ( que por cierto me han entrado ganas de comerme unas!)
Como veis en breve estaré ahí, entrenando para lo que haga falta. Nada puede detenerme ya!